lunes, 20 de febrero de 2012

Manuela.

     A mis tres meses de vida, la avaricia blanca me arrancó de los brazos de mis padres, introduciéndome en un barco lleno de dolor, odio y llanto.
     Mi destino, un mercado en una Isla de America, donde me tiraron a la espera de que alguien me comprara. Pasé horas entre frutas y hortalizas podridas, las moscas se posaban en mi cara y mi llanto no era reclamo caritativo para nadie.
Parecía que el mundo se había olvidado de mi existencia, hasta que alguien reparó en mi.
-¿Cuanto cuesta esa cosa negra?
-Si esta viva... te la dejo por tres monedas de plata.- respondió un ser cuya alma estaba fundida en el infierno.
-Me la llevo.
      Aquel hombre me sacó de las frutas y hortalizas podridas, llevándome a una finca pequeña, donde quizás hubieran ciento cincuenta cabezas de ganado y unas cuantas hectáreas de tierra sembradas con caña. El buen samaritano, descendió de su calesa, llamando a su esclava domestica de confianza.
-Toma Tomasa, dale un buen baño a esta criatura. Y rescata la cuna de mi hijo de donde esté y ponla en mis aposentos, después lleva allí a la niña.
      Aquella negra, me recogió en sus brazos con una ternura materna, se detuvo en mi recién empezada cabellera, y jugando con ella preguntó:
-¿Y como la llamaremos amo?
-La llamaremos Manuela.
      La obediente esclava cantandome una vieja nana, me llevó a la cocina. En una batea me dio un baño con flores de azucena, después me hizo tomar un poco de leche endulzada con miel y me introdujo en la cuna, para que pudiese descansar mi pequeño cuerpo.
Ya bañada, mi amo se acercó y me observó con detenimiento.
-Tienes algo especial, Manuelita. No eres un ser humano normal. Ningún bebé, hubiese resistido el viaje y mucho menos el calor de esta región, es como si el destino me enviara a traves de ti una señal. Por eso, desde hoy, haré un pacto contigo y con dios. Delante de los blancos, te trataré como una negra más, pero cuando estemos solos, te cuidare igual que esa hija que un día se me fue.
Yo sonreía como si ya desde entonces, comprendiese el sentido de las palabras.
Así crecí, trabajando de esclava domestica.
      A mis cinco años, mi obligación en la casa era ayudar a Ma Tomasa en los que haceres de la cocina. Los hombres blancos que trabajaban en la finca y los que iban de visita, se burlaban de mi por mi corta estatura, solían llamarme monita y a veces iban más allá tirándome plátanos. Mi amo nunca reparó en tal daño moral, quizás porque jamás me vio llorar ni molestarme con la situación. Yo solía poner una sonrisa ante la desagradable escena y él, hacia como que no veía nada.

      Por las tardes, a la caída del sol, caminabamos por la finca. A mi protector y señor, le gustaba sentarse en un tronco caído a la orilla del camino y contemplar las estrellas, decía: "que todo hombre necesitaba conversar a solas con sus pensamientos."
-No olvides Manuela,- me repetia- en la vida no hay amigos o enemigos, sólo aliados. Observa antes de hablar y nunca discutas. Reflexiona.
      Me hacia bien escuchar sus palabras, a la vez que me acercaba a sus brazos en busca de calor paterno, él notaba mi pequeño cuerpo y me empujaba de forma cariñosa. Empezábamos a reír, disfrutando de las tardes hasta que la noche reinaba de lleno.
      Cada mañana para mi era la misma rutina, salvo cuando llegaba el maestro del primogénito de la casa. Yo le pedía permiso a Ma Tomasa y me escondía detrás de la puerta, a escuchar las lecciones. Me gustaba oír historias de guerras pasadas, disfrutar con el sentido de la aritmética y sobre todo, dejarme llevar por el compás de la música.
      Un jueves me encontraba en mi pequeño rincón, escuchando aquellas lecciones, cuando sentí el eco de la voz de mi amo proveniente de la sala. Su voz era ronca y dura, discutía acaloradamente con unos tratantes de ganado. Sin hacer apenas ruido, me acerqué despacio e hice lo que mi buen señor me enseñó. Observé la situación y me dirigí al piano, con suavidad abrí la tapa, me senté, respiré hondo y comencé a ejecutar una pieza de Mozart.
Aquellos hombres al escuchar la melodía, se quedaron atónitos, sus miradas reflejaban incredulidad y asombro. Cuando terminé, ellos en vez de aplaudirme, se rieron hasta perder el aliento. Yo con el mismo sosiego con el que me senté, me levanté y me volví a la cocina.
-¡Caray!, no te vayas monita.- Me gritó uno. -Toca otra cosa y demuestra que los monos sois más inteligentes que los negros.
Mi amo apretó su fusta con rabia, le miré a los  ojos y con  tranquilidad regresé al piano. Toqué la misma pieza una y otra vez, hasta que aquellos estúpidos, calleron borrachos de tanto aguardiente.
Esa noche mi señor hizo un gran trato, vendió todas sus terneras y algunas vacas para leche. Y aunque en sus ojos brillaba la satisfacción por la venta realizada, me abrazó y con pena me dijo:
-Gracias Manuelita, necesitaba vender ese ganado. Pero también esta noche, he vendido tu orgullo.
Le sonreí y con serenidad contesté:
-Soy esclava señor mio, no tengo propiedades.
-A partir de hoy sí. Te encargarás de ir a comprar al mercado y ¿sabes que?, tendrás tu propia carreta con caballos. Pero dime Manuelita, ¿quién te ha enseñado a tocar el piano?
-Suelo esconderme tras  la puerta, cada vez que llega el maestro Euspicio a darle clases al señorito, y memorizo donde él pone sus manos.
      Don Miguel, que así se llamaba mi amo, soltó una sonora carcajada. Sirvió un poco de aguardiente en dos copas cediendome una a mi.
-Desde hoy, darás clases de todo. Pero tendré que mandarte a la casita del río, aquí no podrá ser. Vendrás todas las mañanas a ayudar a Tomasa y por las tardes, recibiras las lecciones. Y ahora, tomate el trago "monita".
Aquel líquido me quemó por dentro, pero siendo sincera, me gustó y desde entonces a estado presente en mi vida.
      Al día siguiente, mi amo selló el pacto con aquellos indeseables y yo, volví a representar mi papel de la mona y el piano. El día transcurrió entre risas y plátanos que rebotaban en mi cabeza, pero aquellos hombres, jamás regresaron a su lugar de origen.
 Les introduje polvo de sapo en el café, un veneno que me enseñó a preparar  Ma Tomasa para aliviar la angustia de los perros a la hora de morir. La dosis introducida, tenía un retardo de unas doce horas, tiempo suficiente para que salieran de la finca y murieran llegando a su destino.
Nunca nadie sospecho nada y todos recibimos nuestra  justa recompensa.
Mi amo, su trato con el ganado. Yo mi carreta con sus caballos. Y ellos, la muerte.

                                             .....................................................

La daga pensante.

Estas son las dos primeras páginas de mi primer libro.

13 comentarios:

  1. Me ha encantado la historia y el desarollo de cada escena. Enhorabuena.Si lo publicas sera un gran exito.

    un fuerte abrazo

    fus

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  2. ¡Hola Mariam! vi hace unos días en questionity.com un relato tuyo, "El reino de los cielos". Tambíen yo ando por allí publicando los míos. Me llegó un mensajito de Globedia y me adscribí, aunque la verdad es que no me gusta demasiado esa web, aunque es otra alternativa más donde publicar mis escritos. Bueno, ¿finalmente vas a publicar un libro? ¡Enhorabuena! Te deseo lo mejor del mundo en esa singladura y si llegas a publicar, yo quiero un ejemplar, cueste lo que cueste. Escribir un libro es una tarea ardua y lleva tiempo. Te echaré mucho de menos si ya no regresas por aquí o Globedia. Yo tuve una época en que escribía novelas muy largas, pero publicar son palabras mayores. No tengo ya paciencia ni tiempo para algo así, uffff... recuerdo las horas y horas y horas de documentación, repasar, revisar, corregir, cientos de apuntes para evitar incoherencias, pliegos con personajes, características, inventarse una vida entera y que todo tenga sentido. No sé si sería capaz ahora de algo así. Bueno, una última cosa, si publicas hay algunas erratas en tu texto que habría que pulir, nada grave ni demasiado escabroso, pero creo que la publicación ya exige un tratado de lifting y esmerilado exhaustivo. Tendrías que revisar pequeños detalles y corregirlos, ya sabes que te lo digo con todo el cariño y con ánimo constructivo amiga. Además, mis propios textos también tienen algunos errores y a veces tengo que releerlos varias veces para comprobar que está todo en orden. Bueno, paso al análisis de este soberbio relato. El título es de lo más apropiado, un nombre mundano y corriente que le da a la historia verosimilitud y cercanía, Manuela es una amiga de toda la vida, esa vecina que todos conocemos, es cercana y real, humana y tangible, pertenece a nuestro círculo y nos conecta con la realidad, a diferencia de algunos de mis personajes Morganas, Diandras y Darinka que sólo pueden existir en la ficción. Manuela le da a la historia un cariz creíble, humano y afín. Buena elección. Habla Manuela de un personaje casi familiar y recupera esa estirpe de nombres en peligro de extinción: Manuela, Claudia, Yolanda... ahora la gente busca nombres estrambóticos para denominar a su progenie... la historia me encanta por diversos motivos, aunque ya conoces mis gustos estrafalarios y extremadamente orlados, me gusta disfrutar de una buena historia humana, sensible, emotiva, con densos y hondos desfiladeros emocionales, donde se conjugan a la perfección las experiencias vitales de estos protagonistas urdidos en esa fábrica maravillosa de nuestra mente... (Prosigo)...

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  3. La esencia de la historia es abominable en mi opinión, no por tu pluma... me refiero a lo que nos cuenta. La privación de la libertad, esa realidad casi palpable que fue veraz ayer mismo, la esclavitud, esos esclavos, seres humanos de quien se dudaba tuvieran alma y que eran tan sólo carne sobre hueso, despojos de la raza humana sin intelecto ni sentimientos, poco menos que primates ignaros que sólo servían para laborar, los hombres, y para otras cosas mucho menos honorables ellas... pobrecitas.... Hay algo que admiro de tus escritos, ¡enhorabuena! yo no sé hacerlo, pero tú consigues que parezca fácil. La hilación de la historia, como vas narrando de manera pormenorizada qué sucede. Se me da fatal: "La obediente esclava cantandome una vieja nana, me llevó a la cocina. En una batea me dio un baño con flores de azucena, después me hizo tomar un poco de leche endulzada con miel y me introdujo en la cuna, para que pudiese descansar mi pequeño cuerpo" Magistral, que bien hilvanado. Yo me pierdo en estos párrafos, me cuesta seguir, será por esta mente mía que divaga y se pierde, por mi falta de concentración. El relato es soberbio y has mejorado mucho. Pronto no te harán falta ni mis consejos ni mis comentarios. Te echaré de menos, sniff, sniff... preciosa y con tremenda carga emocional la llegada de la pequeña a casa de su amo. Abominable hasta la médula la historia, que sea real, que haya pasado de verdad, una época donde una mujer era la esclava y un hombre su amo, ¡Qué palabra tan horrenda! tú lo narras genial y nos regalas a este "amo" sensible, tierno en ocasiones, que se preocupa por Manuela, que no la usa como si fuera un enser. Magistral y merecido final para esos canallas y fabulosa toda la parte de este hallazgo de las dotes artísticas de la "superdotada" Manuela, que sorprende a propios y extraños con su habilidad con el piano. Demostrando, por bochornoso que ello sea, que es una persona como las demás, y por tanto, con capacidades y aptitudes. Maravillosamente narrado. ¡Cómo has mejorado! Estoy orgulloso de ti, Mariam, ¡muy bien muy bien! Otro de mis relatos favoritos. Un saludo amiga

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  4. Gracias Fus por tus amables palabras. De momento, es un proyecto que cada día va tomando más forma, y que me apetecía compartir con vosotros.
    Un saludo.

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  5. Hola Victor, a mi también globedia me envió varios correos para participar en la nueva web, comprendí que globedia me pedia cierto apoyo hacia un nuevo proyecto y envié uno de mis cuentos, pero al igual que tú, no siento mucha atracción por ese sitio.
    De momento, Manuela es un proyecto, una historia que me apetecía mucho escribir.Y después de la insistencia de familiares y amigos, me he lanzado a ello, aunque me siento más comoda con mis cuentos y relatos. He subido estás dos primeras páginas, para saber vuestra opinión, en especial la tuya que siempre es constructiva y me ayuda a visualizar aquello que de forma objetiva muchas veces no veo.
    Si algún día, la novela se publicase,el primer ejemplar sería para ti, ya que gracias a tus sabios y buenos consejos cada día mejora mi forma de plasmar en palabras aquellas historias que viven en mi mente.
    Un saludo.

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  6. ¡Hola Mariam! Me alegro que valores mis consejos y comentarios y sería un honor tener una novela tuya. Me alegro de que yo, en algún modo, sea responsable de ese ánimo que te ayuda a seguir escribiendo. En lo que te pueda ayudar o aconsejar no tienes más que decírmelo. Saludos

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  7. Me alegra que te hayas decidido a lanzarte en la escritura de un libro, creo que te sobran cualidades para ello y espero que tengas éxito en tu aventura literaria. Desde luego el comienzo promete.
    Un beso Mariam y suerte.

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  8. Gracias casasreales,por tus palabras de animo,que me motivan a seguir adelante en este proyecto que me esta brindando gran satisfacion.
    Un saludo

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  9. BUENISIMO RELATO ME ENCANTO MUCHO TIENE MAGIA..COLOR..ESPERANZA,,,,,,Y TANTAS COSAS MAS.....quiza no llegue mi comentario a ti..quiza no sea de importancia ..pero queda el embrujo...asi...como el ocaso de la noche..sabiendo su muerte...su quietud...su paz......
    abrazos...magdalena

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  10. Gracias por tu comentario María, y bienvenida a esta mi ventana de donde veo el mundo, a través de la verdad, la imaginación y el tiempo.
    Un saludo.

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  11. Si esas son las dos primeras p´´aginas, no me imagino lo que vendrá después...Trae a la memoria tiempos de mucha historia, de mucho dolor, de mucha lucha,de mucho aprendizaje...

    Atrapánte desde sus primeras líneas...capaz de despertar ansiedad por conocer el resto, sumado al talento que tienes para relatar...son elementos suficientes que garantizan el éxito de tu obra.
    ¡Suerte!

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  12. Que mala eres Mariám, me haces leerte porque sabes que me quedaré prendado de tu Manuela, es una manera exquisita de publicitarla.
    Como dice Eva es atrapánte. Más de lo que dijo Eva no podría.
    Me ha gustado mucho escritora.
    Luis

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  13. Mi uqerida Mariam,,he leido estas dos primeras paginas y no hay lgar a dudas,tu ewscritura me deja embelesaday me remonta de manera muy elocuente a los tiempos pasados de la esclavitud,a la vez que le iyectas ternura a tu escrito,,,bellisimo,,voy a esperar la continuacion de esta novela con mucho gusto.

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